El bolígrafo de gel verde
(Eloy Moreno)
Cuando el libro cayó en mis manos y leí la contraportada, a parte de las superficies de vida en la que vive el p`rotagonista, que afortunadamente en mi caso es mucho más extensa, me atrajo la frase de que aquella novela no había sido galardonada con ningún premio conocido, ni siquiera con uno desconocido. Está claro que lo de los premios es lo de menos, y lo de más es que Eloy Moreno agradece que disfrutemos con su novela, porque el mayor mérito de éste autor ha sido haber conseguido que esta novela salga a la luz.
La novela relata el momento en el que una persona decide cambiar su vida, despertar a la esperanza. Se da cuenta de que cuando las cosas van mal, nos empecinamos en cambiar los personajes, y sin embrago lo que hay que hacer es cambiar la historia. El cambio se produce realmente cuando te fijas en el camino por el que andas, olvidándote así de tu pasado. Cuando empieza a recorrer la superficie que queda fuera de su estrecho círculo, los 445 metros cuadrados en los que vive a diario. Y cuando comprende que las distancias están hechas para que el hombre las recorra únicamente por placer.
Me quedo con una reflexión que el autor escribe en las últimas páginas del libro:
"Hay una palabra capaz de resumir todo un cambio de vida: Tiempo,
Tiempo para conocer nuevos lugares,
Tiempo para disfrutar por las mañanas de una caricias, por las noches de unos roces más profundos, Tiempo para hablar de problemas y soluciones,
Tiempo para aprender cosas que enseñar a los demás,
Tiempo para leer y disfrutar haciéndolo,
Tiempo para la soledad,
Tiempo para perderlo, si se tiene,
Tiempo para estar en compañía."